Imparcial film
Reseña
Fundada en el mes de septiembre de 1918, Imparcial Film es una de las revistas cinematográficas de mayor trayectoria en el país. A lo largo de 35 años sufrirá numerosos cambios en su formato, su intervalo de aparición y sus firmantes, pero jamás se apartará de una línea matriz. Imparcial es una revista de informaciones para la gente que compone el ‘gremio cinematográfico nacional’, remarcando en sus páginas sin cesar la notable utilidad que ésta tiene para los exhibidores. Ya desde el Nº 1, se informa a los “señores distribuidores” que no se publicaran avisos de “malas películas”, para que el exhibidor no se vea engañado.
Dos características dan cuenta de la tipología de revista que Imparcial mostraba en su primera etapa. La sección dedicada al cine norteamericano Informations for the Unites States se encuentra escrita en inglés. Está es una fuerte señal a la hora de configurar el estrato social de público al cual se dirigía en aquellos primeros momentos. Por otra parte desde el Nº 2 se realiza un concurso sólo para operadores y empleados de salones de exhibición, a los cuales se les pide que indiquen cuales son las dos mejores películas del año de cada compañía. Este tipo de encuestas, concursos y correspondencia con los lectores será una constante en la revista a través de los años, que indica el tipo de contacto que se buscaba con el lector.
Entrada la década del ’20, la revista empieza a abrir su espectro incorporando a sus contenidos, temáticas paralelas al cine como hogar, letras y deportes. Podríamos denominar a esta, una segunda etapa, que se extiende hasta principios de la década del ’30. En este período sigue esencialmente una línea que denominaremos ‘semanario de informaciones’. Esa función se mantiene a lo largo de todos los números, imponiéndose sobre otras características que tendrán más tarde las revistas de cine, como la crítica, el análisis y la revisión histórica. Desde el propio nombre de las secciones se justifica lo dicho: Bolsa de estrenos, Informaciones cinematográficas, Desde la platea (breves reseñas de films), Miscelenas cinematográficas. Obteniéndose como resultado una amplia cantidad de informaciones breves y notas anecdóticas.
Definitivamente, la mayoría de las notas de esta etapa cubren los más variados avatares de las ‘stars’ norteamericanas. La mayoría de los artículos poseen un marcado carácter didáctico. La sección denominada Diccionario biográfico del cine, que se mantiene en casi todo el lapso, es un buen ejemplo. Pero para encuadrar correctamente estos dos aspectos, no debemos olvidar que la revista se edita durante la primera mitad de la década del ’20. La cultura cinematográfica tenía pocos años de vida y el nivel de conocimiento específico que los lectores poseían del séptimo arte era acotado, de ahí quizá, la tendencia al didactismo.
Una curiosidad del período es que, aunque su objeto central siempre sea el cine, contiene un importante número de páginas dedicadas al deporte, esencialmente al futbol y al boxeo. El espacio de la sección deportes disminuye con el correr de los años, cediéndole su espacio a las letras y al hogar. La revista en esta etapa se preocupa por atraer diversos tipos de lectores. La señora se entretendrá con las novedades más importantes sobre sus ídolos de Hollywood, mientras que el señor podrá seguir las vicisitudes de la liga de futbol, o el último combate de Firpo.
Así entramos en una tercera etapa de la revista que comienza en la década del ’30 y se extiende en los años ‘40. En este período la revista se vuelca exclusivamente al cine como en la primera etapa. Esto se debe al estallido de la industria cinematográfica nacional y al crecimiento del gremio en general, apuntalado por la apertura de nuevas salas de exhibición, el funcionamiento de más empresas distribuidoras y un público que acompañaba este desarrollo en forma masiva.
La estructura de la revista se mantiene, las secciones cambian de nombre pero continúan dedicándose a lo mismo: reseña de films, novedades del gremio y chimentos nacionales e internacionales. La sección Bolsa de estrenos (firmada por Athos) empieza a dar un espacio importante a las películas nacionales, y con el correr de los años las simples reseñas son acompañadas de importantes fichas técnicas y de breves críticas a media columna.
La revista reflejará repetidamente distintas polémicas acontecidas durante aquellos años: la censura de películas como El gran dictador (Charles Chaplin, 1940) y Tres argentinos (anclados) en París (Manuel Romero, 1938). Las controversias entre exhibidores, distribuidores y Estado por el valor y los impuestos en las entradas. En estos dos temas particulares, Imparcial será un moderado crítico de la censura, pero un activo crítico de los distribuidores y el Estado cuando sus procederes perjudiquen a los exhibidores. Este hecho resulta paradójico teniendo en cuenta que el 90 % del espacio publicitario de la revista estaba ocupado por los suculentos programas que ofrecían las compañías distribuidoras.
Por otra parte, es interesante recalcar ciertas embestidas de la revista contra la radio. En el Nº 787 de 1934 se dice que la radio compite contra el cine de forma desigual. También se la tilda de frívola, de mezclar todo con avisos y pastiches, para finalizar reaccionando contra la crítica cinematográfica en la radio: “¡Pobre crítica! Basta que un joven famélico armado de una cuartillas hilvanadas de revistas extranjeras las lea ante el micrófono con tono de doctor, para juzgar el mérito o demérito de una película (...) ¿Hay derecho para que un semianalfabeto en cuestiones de arte cinematográfico se meta a crítico, y por un mísero de plato de lentejas?”.
Entre los redactores existe un alto nivel de rotación. Casi no hay redactores estables, generalmente las colaboraciones se remiten a una breve cantidad de ejemplares. Esta despersonalización tiene muy pocas excepciones a través de toda la existencia de la revista. Sólo el redactor apodado ‘Athos’ será quien firme una abundante cantidad de notas. La revista funciona así como un ente, una especie de organismo ‘al servicio del gremio’. No es un dato menor que no se puedan hallar los nombres de los directores de la segunda etapa, y que sólo se encuentren fortuitamente, los nombres de los directores de la primer etapa en un artículo del año 1943.
Resumiendo, Imparcial Film es una de las primeras revistas dedicadas al cine en nuestro país, con aparición semanal. Su función primordial fue la de informar y difundir. Desde una perspectiva actual, la misma puede resultar muy útil para aquellas personas interesadas en obtener información sobre la distribución y exhibición de películas extranjeras durante la primera mitad de la década del ’20 en la Argentina.
Ficha técnica
| Director | (1ª etapa): Lorenzo Fernández Duque y Víctor Sierra / (3ª etapa): Antonio Ibarrondo y A. Romero Delgado |
| Editorial | |
| Domicilio | (1ª etapa): Corrientes 965 / Lavalle 671/ (2ª etapa): Maipu 457 / (3ª etapa): Talcahuano 612 |
| Nº de Prop. Intelectual | 043846 |
| Formato | 1ª etapa: 19 cm x 27cm / 2ª y 3ª etapa: 28cm x 39cm. Tapa coloreada. Interior Blanco y negro con fotografía coloreada. Sección interna dedicada a los estrenos, en hoja satinada |
| Secciones Fijas | Al margen de la farándula, Bolsa de estrenos, Desde la platea, Informaciones cinematográficas, La glosa del cine, Estrenos Nacionales, Ruido de fondo, Notas de los Estudios Argentinos, Informaciones del Cine Argentino |
| Columnistas | Octavio C. Ramp, Carlos Fernández Duquey, Samuel de la Plaza, José A. Ferrató, Luis R. Visconti, Claudio Marshall, Laurent Dux, Lalo Smith, Raimundo Manigot, Eduardo Zoppi |
| Auspiciantes | Cinzano, La Zincográfica, Metropol, Regina Palace, New York Film Exchange, Natalini, Fox Film Argentina, Ajuria, Rialto, Argentine Foreign Film |
| Periodicidad | (1ª etapa): Quincenal / (2ª etapa): Semanal / (3ª etapa): Decenal |
| Años de publicación | 1918-1948 |
| Ubicación en repositorios | BIBLIOTECA NACIONAL: 1918- 1919- 1920/ 1933/ 1935/ 1936/ 1937/ 1938/ 1939/ 1940/ 1941/ 1942/ 1943/ 1944/ 1945/ 1946/ 1947/ 1948 (427) (Relevamiento 2003)
MUSEO DEL CINE: 1922- 1923- 1924- 1925- 1926/ (163) (Relevamiento 2003) |
Referencias
Piedras, Pablo (2003). Imparcial film. En Kriger, Clara (dir.) Páginas de cine. Buenos Aires: Archivo General de la Nación (Pp. 112-115).
El texto original de esta entrada es una transcripción del artículo citado de Piedras.
